En esta lección nos detendremos en las medidas necesarias para crear una cultura del ahorro energético.
Las medidas para un consumo responsable de la energía están fundamentadas en una cultura del ahorro y en un cambio de hábitos a la hora de consumir energía. Este tipo de medidas afectan a nuestra sociedad en general y, según cambie sus pautas de consumo, se conseguirá el ahorro consecuente.
Para propiciar este cambio de cultura se suelen llevar a cabo campañas de fomento del ahorro relacionadas con la conciencia ciudadana, la difusión, la divulgación y la formación en medidas de ahorro energético.
Se destacan las campañas difundidas por los medios de comunicación de masas (televisión, radio), así como la promoción del ahorro a través del ejemplo y la adopción de buenas prácticas para el uso de la energía, ya sea desde las instituciones públicas o desde las asociaciones civiles.
El ahorro de energía puede alcanzarse en cualquiera de las actividades diarias. Actualmente, hay muchos adelantos tecnológicos orientados a este fin que han obtenido buenos resultados. Pero, en primer lugar, es preciso hacer hincapié en la importancia de cambiar nuestra forma de usar la energía. Si mejoramos nuestra “conducta energética” en casa, no sólo disminuirá la facturan eléctrica, sino que tendrá efectos positivos a nivel local y planetario. Este cambio pasa por incorporar pequeños hábitos en el día a día.